Hace ya más de un año que llegué a la conclusión de que la optimización para motores de búsqueda (SEO) era, o iba a ser pronto, una pérdida de tiempo. Ya me había despedido, 6 meses antes, de dedicar una hora al día a conseguir enlaces recíprocos en fisioterapia Zaragoza.
¿Qué me llevó, en aquel momento, a lo que muchos habrían dicho que eran movimientos muy precipitados? Al fin y al cabo, el enlace recíproco seguía siendo expuesto por todo el mundo como una forma esencial de conseguir una buena clasificación, y las herramientas de software seguían siendo comercializadas activamente. El software de posicionamiento en buscadores seguía siendo muy comercializado y lo sigue siendo hoy en día; la densidad de palabras clave era un término de moda que se promocionaba como si fuera una ciencia esencial que debían practicar todos los buenos webmasters conscientes del SEO.
Lo que hice fue volver a los fundamentos del marketing. Había recibido mi formación en marketing en los años 80 y tenía experiencia práctica en marketing con mi propio negocio desde mediados de los 90. No nací solo en el marketing de Internet, por lo que todavía podía ver más allá de las anteojeras y el bombo.
Un aspecto muy básico pero importante del marketing es conocer tu mercado. En lo que se refiere a las clasificaciones en los motores de búsqueda, está claro que una parte importante de ese mercado eran los principales motores de búsqueda, Google, Yahoo y MSN, siendo Google el líder indiscutible entonces, y un año después, hoy.
Hace 18 meses empecé a pensar que, en lo que respecta a los enlaces recíprocos, se estaba convirtiendo en una zona de spammers. Seguramente, argumenté conmigo mismo, Google no quería realmente clasificar un sitio web en un puesto alto sólo porque el administrador de la web tenía las herramientas y el tiempo para perseguir la obtención de enlaces recíprocos. No tenía sentido. Y lo mismo ocurría con la compra de enlaces. ¿Por qué un sitio web debería tener una posición alta porque se ha gastado en comprar enlaces?
Lo que Google, y los demás, querían realmente era clasificar los mejores sitios web para un término de búsqueda concreto, y parecía sólo cuestión de tiempo que olieran y extinguieran los abusos como la construcción de enlaces descaradamente artificial, el spam de blogs, el scraping y el SEO extremo.
Hace un año, inicié dos nuevos sitios web sin pensar realmente en el SEO. Como escritor, me contentaba con intentar ofrecer lo que los motores de búsqueda querían: contenido original sobre lo que la gente buscaba. Aunque proporcionaba etiquetas de título y descripción, todo lo demás se escribía siguiendo la corriente. La frase de la palabra clave para cualquier página saldría en el flujo natural. Podía escribir a gusto sin utilizar ninguna herramienta para comprobar la densidad de las palabras clave.
El primero de esos nuevos sitios web, hace 13 meses, estaba en el nicho de la superación personal, que es altamente competitivo. Esperaba que Google me pusiera en el «cajón de arena» por eso, y así fue. Pero seguí trabajando, siguiendo mi principio de no-SEO. Por supuesto, ninguno de nosotros, fuera de Google, sabe con certeza si existe el sandbox, pero sin duda hay un tiempo de espera antes de que un nuevo sitio sea lanzado de lleno al crisol del ranking.
En el caso de la mejora personal, la última actualización de Google hizo que mi sitio saliera de la caja de arena después de unos 12 meses. Así que, por fin, pude ver si mi enfoque de no SEO iba a dar algún resultado positivo. Afortunadamente, se vieron inmediatamente algunos rankings altos, incluyendo algunas posiciones #1. En uno de esos términos, Yahoo le siguió unas semanas después hasta la posición nº 1, mientras que el sitio era nº 2 (ahora 1) en MSN.
Ahora bien, esto es pronto para ese sitio en particular, y hay mucho que hacer para conseguir más clasificaciones altas. Sin embargo, estoy seguro de que el SEO es infinitamente más sencillo de lo que algunos expertos, especialmente los que venden herramientas de clasificación, tienden a hacer creer.
Desde que empecé ese sitio en particular, sólo he hecho un cambio importante, y es convertir todos mis sitios web a CSS. Proporcionar un sitio rico en contenido que sea fácil de rastrear para los robots de los motores de búsqueda es el aspecto más importante del nuevo y simplificado SEO. De hecho, seguir los consejos de Google a los webmasters es todo lo que hay que hacer, y es gratis.
Por supuesto, los que tienen productos de software para vender argumentarán que podría hacerlo aún mejor con su software. Pero si Google decide incluir ese software en su lista negra como herramienta de manipulación, entonces todo mi duro trabajo se podría deshacer. Así que dejaré que los demás persigan las sombras con el software de clasificación, y me limitaré a disfrutar escribiendo contenido. Después de todo, eso es lo que el marketing básico me dijo que hiciera.
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